¿Sabes respirar? Aprende aquí

En la rutina, la cotidianidad y el día a día se pasan por alto factores fundamentales de la vida, el constante afán, las ocupaciones y obligaciones impiden caer en cuenta de acciones simples como parpadear, estirar, hablar, comer y en muchas ocasiones aprender a respirar adecuadamente.

¿En qué me beneficia una respiración controlada?

Respirar es considerado por los expertos un principio básico para mantener una vida saludable, tranquila y balanceada, es fácil creer que no es un aspecto importante y que las intenciones de la respiración son comunes e iguales, esto surge porque desde la etapa inicial de la niñez por parte de padres, maestros, adultos, entre otros, no existe algún conocimiento previo para enseñarle al niño desde esa edad como deben ser sus intenciones al momento de inhalar y exhalar.

¿En qué momento mi cuerpo no está respirando bien?

De esta manera la Organización Mundial de la Salud (OMS) afirma que “La respiración es una función del cuerpo tan importante que es totalmente inconsciente. No es necesario pensar en respirar, sencillamente se hace. Es evidente que la falta de oxígeno es muy perjudicial y por eso el cuerpo realiza el proceso de forma automática. Sin embargo, y precisamente por eso, a veces se cae en cuenta que la respiración es poco eficiente o superficial, por ejemplo, en situaciones de nerviosismo, tensión o estrés. Saber reconocer estos momentos y aprender a respirar bien ahorrará dolores de cabeza y problemas de salud, además te ayudará a mantener la calma, reflexionar y saber llevar situaciones estresantes”.

La clave para aprender a respirar está en ser conscientes de la acción y esto se puede lograr a través de ejercicios prácticos como estos:

Respiración profunda: 

Básicamente, sirve para tranquilizarse tras una situación de estrés o esfuerzo. Se basa en tomar aire por la vía nasal, mantenerlo en los pulmones y finalmente soltarlo con suavidad por la boca. Cada uno de los pasos debe durar alrededor de cuatro segundos.

Respiración diafragmática o abdominal:

Es parecida a la respiración anterior, solo que en este caso va a ser abdominal. Para llevarla a cabo debe haber un espacio para estar cómodo, preferiblemente sentado o acostado. Se inhala por vía nasal durante alrededor de cuatro segundos, se mantiene el aire en el interior unos instantes y se expulsa suavemente por la boca. Se requieren inhalaciones largas, llenando de aire todo el cuerpo.

Respiración completa:

Esta técnica se enlaza con la respiración profunda y la abdominal. El proceso comienza con la expulsión de todo el aire de los pulmones. Después, se inhala suave y profundamente hasta llenar, el abdomen, para continuar inhalando hasta copar también los pulmones y el pecho. Se mantiene el aire dentro unos segundos y posteriormente, se procede a expulsar con lentitud el tórax y luego el abdomen.

Respiración alterna:

Conocida como respiración alternada por las fosas nasales, su práctica es habitual en yoga. Se tapa una de las fosas nasales para realizar una inhalación profunda por la fosa nasal que ha quedado libre. Una vez inhalado el aire, se procede a cubrir la fosa nasal por la que este ha entrado y destapar la otra, por la cual se producirá la exhalación.

Respiración de fuego:

Se inicia el ejercicio respiratorio con una inhalación lenta y profunda, después una exhalación rápida y forzada desde el abdomen. Para subir el ritmo de inhalación y exhalación cada dos segundos hasta un total de diez respiraciones.
Es un proceso en el cual se debe contar con la paciencia suficiente para realizar las repeticiones necesarias y de esta manera, convertirlo en un hábito consciente que aporte beneficios a la salud física y mental, algunas ventajas para tener en cuenta:

• Incrementa el número de glóbulos rojos: Una correcta oxigenación produce mayor cantidad de sangre para eliminar toxinas.
• Mejora la capacidad del cuerpo para asimilar alimentos: El oxígeno participa en el metabolismo del organismo, este es un proceso esencial para convertir los alimentos en energía.
• Favorece el funcionamiento del sistema nervioso: El oxígeno que recibe el cerebro, columna y nervios permite la relajación de estos, enviando mensajes de calma y tranquilidad.
• Brinda mayor fuerza y salud a los pulmones: Con una adecuada respiración mejora la capacidad pulmonar previniendo enfermedades.
• Aumenta la vitalidad del corazón: Respirar profunda y lentamente aumenta la eficiencia de las funciones cardíacas previendo posibles deficiencias como infartos.

Después de conocer diferentes argumentos, ejercicios, ventajas y beneficios de empezar a aprender a respirar conscientemente como rutina, es momento de preguntarte. ¿Sabes respirar? Déjanos tu respuesta en los comentarios.